Con el cambio de casa encontré en una caja unas africanas de ebano que me traje de mi tierra (Cuba) en un viaje que hice hace un par de años y que debi esconder debido a que si lo dejaba a la mano de Amelia iban a terminar destruidas. Unido a que hemos decidido decorar lo mas ecologico posible a mi esposo se le ocurrio la brillante idea de convertir unas cajas de madera (conocidas como tomateras) en repisas. Ahora sí podría colocar en exhibición todos esos objetos de peligro y que me encantan.
Me puse manos a la obra... compramos las cajas y como quedaban muy hondas con serucho en mano les quite todo un nivel y por ultimo consegui colores que combinaban y resaltaban en la pared café de la sala... el resultado me ha encantado y aca se los dejo... por supuesto, la tarea de fijarlas en la pared ha quedado en manos de mi esposo.
0 comentarios :
Publicar un comentario